Si su DNS está detrás de un cortafuegos, no podrá acceder a Internet. No puede completar una de sus tareas principales que es proveer la resolución del nombre. Al apuntar a un forwarder el problema se soluciona.
Otra razón de su uso aparece cuando una DNS está localizada al final de un enlace que es lento. Envez de intentar resolverlo todo él mismo, enviará la petición a un forwarder (al que se le delega la función) que esté en el tro extremo del enlace. A menudo, el segundo DNS tiene una utilidad más grande que el primero, ya que tiene un mayor conocimiento al estar en posición de responder a una petición de este calibre al tener una gran caché.